Este tiene que ser un tema sumamente interesante ya que revela algunas verdades claves en la historia del pueblo de Israel.
Lo primero que debemos entender es que Israel fue una nación escogida por Dios para ser una nación con un gobierno Teocrático, con leyes y estatutos establecidos por Dios basados en la santidad y el orden.
Pero Israel se deterioro y en su apostasía quiso ser como las otras naciones. 1 Samuel 8:19 Pero el pueblo no quiso oír la voz de Samuel, y dijo: No, sino que habrá rey sobre nosotros; 20 y nosotros seremos también como todas las naciones, y nuestro rey nos gobernará, y saldrá delante de nosotros, y hará nuestras guerras. 21 Y oyó Samuel todas las palabras del pueblo, y las refirió en oídos de Jehová. 22 Y Jehová dijo a Samuel: Oye su voz, y pon rey sobre ellos. Obviamente esto molesto a Dios, pero finalmente accedió permitiendo que el pueblo escoja a uno que realmente aparentaba ser Rey y este fue Saul, el final de este ya lo conocemos, termino suicidándose para no caer en las manos de los Filisteos, después de este vino David cuyo corazón era según el corazón de Dios, es decir era un hombre de oración, fue el primer rey sacerdote en Israel, a este le siguió su hijo con Betsabe Salomón que fue el Reino en que mas creció Israel territorial y materialmente, pero no espiritual ya que al final de su Reino las 700 mujeres de Salomón lo hicieron perder la dirección y este termino adorando a Dioses paganos. después de este reino su hijo Roboam cuyo reino se caracterizó por opresión contra el pueblo, las tribus del norte lideradas por Jeroboam, se sintieron agraviadas y decidieron separarse del Reino.
Israel se Dividió en Judá e Israel
El Reino de Israel (Samaria) fue gobernado por 19 reyes todos ellos malvados.
Diez tribus Rubén, Simeón , Gad, Isacar, Zabulón, Efraín, Manases, Dan, Aser, Neftalí.
Los profetas que tuvo Israel fueron: Oseas, Amós, Jonás.
El Reino de Judá (Jerusalén) fue gobernado por 19 reyes y una reina. Ocho fueron buenos y el resto fueron malvados. Lo conformaron las tribus de Judá y Benjamín. Profetas en Judá: Joel, Adías
Cuando vemos el Reino de Juda nos damos cuenta que tuvo 19 reyes y una “Reina”, y es de esa reina que vamos a hablar en las siguientes líneas:
¿Quién fue Atalía en la Biblia?
Atalía fue la hija del matrimonio entre el Rey Acab y la Reina Fenicia Jezabel, este matrinonio es conocido como el que trajo mas desgracia el pueblo de Israel ya que Jezabel manipulo a Acab a su antojo, establecio un culto idolátrico a Baal y persiguió y mando a matar a los profetas de Dios, eso por citar algunas cosas, de ese matrimonio obviamente no podía salir nada bueno.
Atalia llega al poder después de la muerte (asesinato), de su hijo Ocozias y lo primero que hizo fue desatar una persecución contra la descendencia de David.
2 Reyes 11:1 Cuando Atalía, la madre del rey Ocozías de Judá, supo que su hijo había muerto, comenzó a aniquilar al resto de la familia real; 2 pero Josaba, hermana de Ocozías e hija del rey Yoram,[a] tomó a Joás, el hijo más pequeño de Ocozías, y lo rescató de entre los demás hijos del rey que estaban a punto de ser ejecutados. Puso a Joás y a su nodriza en un dormitorio y lo escondieron de Atalía; por eso el niño no fue asesinado. 3 Joás permaneció escondido en el templo del Señor durante seis años, mientras Atalía gobernaba el país.
Este es un cuadro muy parecido al de Moises y nuestro Señor Jesucristo, ya que cuando Atalia toma el poder se asegura de no tener rival como Herodes y Faraón respectivamente, pero Dios uso la vida de Josaba la hermana de Ocozías para esconder a Joas quien permaneció 7 años escondido.
4 En el séptimo año del reinado de Atalía, el sacerdote Joiada mandó llamar al templo del Señor a los comandantes, a los mercenarios cariteos y a los guardias del palacio. Hizo un pacto solemne con ellos y los obligó a hacer un juramento de lealtad allí, en el templo del Señor; luego les mostró al hijo del rey. 5 Joiada les dijo: «Tienen que hacer lo siguiente: una tercera parte de ustedes, los que están de turno el día de descanso, vigilarán el palacio real; 6 otra tercera parte de ustedes hará guardia en la puerta Sur; y la otra tercera parte lo hará detrás de la guardia del palacio. Los tres grupos vigilarán el palacio. 7 Los dos grupos que no están de turno el día de descanso guardarán al rey en el templo del Señor. 8 Formen una escolta alrededor del rey y tengan sus armas en la mano. Maten a cualquiera que intente penetrar las filas. Quédense junto al rey vaya donde vaya». 9 Así que los comandantes hicieron todo tal como el sacerdote Joiada les había ordenado. Los comandantes se encargaron de los hombres que se presentaban para su turno ese día de descanso, así como de los que terminaban el suyo. Los llevaron a todos ante el sacerdote Joiada, 10 quien les dio las lanzas y los escudos pequeños que habían pertenecido al rey David y estaban guardados en el templo del Señor. 11 Los guardias del palacio se ubicaron alrededor del rey, con sus armas listas. Formaron una hilera desde el lado sur del templo hasta el lado norte y alrededor del altar. 12 Entonces Joiada sacó a Joás, el hijo del rey, puso la corona sobre su cabeza y le entregó una copia de las leyes de Dios.[b] Lo ungieron y lo proclamaron rey, y todos aplaudieron y gritaron: «¡Viva el rey!».
13 Cuando Atalía oyó el ruido que hacían los guardias del palacio y la gente, fue de prisa al templo del Señor para ver qué pasaba. 14 Cuando llegó, vio al recién coronado rey de pie en el lugar de autoridad, junto a la columna, como era la costumbre durante las coronaciones. Los comandantes y los trompetistas lo rodeaban, y gente de todo el reino celebraba y tocaba las trompetas. Cuando Atalía vio todo esto, rasgó su ropa en señal de desesperación y gritó: «¡Traición! ¡Traición!».
15 Después el sacerdote Joiada ordenó a los comandantes que estaban a cargo de las tropas: «Llévensela a los soldados que están de guardia frente al templo,[c] y maten a cualquiera que intente rescatarla». Pues el sacerdote había dicho: «No deben matarla dentro del templo del Señor». 16 Por eso la agarraron y la llevaron a la puerta por donde los caballos entraban al predio del palacio, y allí la mataron.
Esta reina persevero en la adoracion a Baal y en perseguir a los siervos de Dios. Asi que tuvo el final que se merecía.
Pero tambien aprendemos que Dios siempre guarda un remanente para salvar a su pueblo y establecer la paz.
Nos damos cuenta que este Reino definitivamente no fue puesto por Dios y fue el producto de la división y apostasía de Israel, de los 38 Reyes y 1 Reina que tuvo Israel solo 8 fueron buenos reyes y la mayoría fueron malos.